Radiotelevisión municipal de Chipiona, 26 de julio de 2019.
La salud debe ser motor político para una mayor ambición sobre el cambio climático. El objetivo es reducir las emisiones de carbono, limpiar nuestro aire, salvar vidas.
El Secretario General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), António Guterres, ha hecho un llamamiento a todos los líderes para que acudan a la CUMBRE SOBRE LA ACCIÓN CLIMÁTICA ONU 2019, cuyo lema será “Una carrera que podemos ganar”, que se celebrará en Nueva York el próximo 23 de septiembre, con planes concretos y realistas para mejorar las contribuciones concretas a nivel nacional para 2020, siguiendo la directriz de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero un 45 % en los próximos diez años y a cero para 2050.
La Cumbre persigue, entre otras cuestiones, movilizar la voluntad política para incrementar la ambición sobre los objetivos del Acuerdo de París. En este sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y un equipo del Secretario General de Naciones Unidas han preparado un “concept paper” sobre salud y cambio climático con el objetivo de que los gobiernos nacionales y subnacionales se comprometan a lograr una calidad del aire que sea segura para la salud de sus ciudadanos y a alinear sus políticas de cambio climático y contaminación del aire para el 2030, comprometiéndose específicamente a:
• Implementar políticas de calidad del aire y cambio climático que alcancen los valores de la Guía de calidad del aire ambiente de la OMS.
• Implementar políticas y acciones de e-movilidad y movilidad sostenible con el objetivo de tener un impacto decisivo en las emisiones del transporte por carretera.
• Evaluar la cantidad de vidas que se salvan, las mejoras en la salud de los niños y otros grupos vulnerables, y el gasto financiero evitado para los sistemas de salud, que resultan de la implementación de sus políticas
• Seguimiento del progreso, intercambio de experiencias y mejores prácticas a través de una red internacional respaldada por el sistema de las Naciones Unidas
Este compromiso tiene por objetivo aumentar el número de personas que respiran aire puro y que viven en ciudades que se han comprometido firmemente a luchar contra el cambio climático. El compromiso implica el compromiso de los gobiernos para mejorar la monitorización de la calidad del aire y diseñar políticas y acciones que aborden tanto la calidad del aire como las medidas de mitigación del clima.
El alcalde de Chipiona, Luis Mario Aparcero, expone que, a nivel local, el objetivo es proporcionar una descripción positiva del impacto de las medidas en la mejora de la calidad de vida, respaldada por una evaluación cuantitativa de los beneficios en la salud que se pueden esperar al tomar estas medidas, y con un apoyo continuado para registrar y promover el progreso realizado gracias a este compromiso.
El compromiso busca proporcionar un objetivo claro, al tiempo que mantiene la flexibilidad para que los países seleccionen la modalidad específica de acciones para lograr este objetivo, dependiendo de sus propios contextos y capacidades.