El PP también tiene responsabilidad en el reintegro que solicita el Ministerio de Industria, como consecuencia de pagos fuera de plazo en 2011, cuando el PP ya detentaba la Alcaldía.

Izquierda Unida de Chipiona ha analizado parte del expediente de la auditoría relativo a la gestión de los fondos REINDUS durante los años 2008, 2009 y 2010 por parte de la empresa municipal Caepionis y con los que se desarrolló la urbanización del polígono industrial la estación y la rehabilitación de las naves del Niño de Oro donde se construyó el museo provisional Rocío Jurado.
Las conclusiones que pueden extraerse de su lectura son principalmente tres, y de especial importancia:
1º Una falta de transparencia en la selección de las empresas para el desarrollo de las obras, en muchos casos se invitaban a tres empresas,( para acogerse al procedimiento negociado sin publicidad exigido por ley) de las cuales, dos renunciaban el mismo día y tenían el mismo domicilio fiscal. La suma de las cuantías de este tipo de adjudicaciones supera los 500.000 €.
2º La auditoría constata que se aprobaron pagos antes de la realización efectiva de las actuaciones .Y que se facturaron y se pagaron sin haber ejecutado parte de la obra.
3º Asimismo se constata que la empresa contratada para la gestión de la empresa municipal ha mantenido una gestión deficiente e ineficaz, de hecho se han perdido partes del expediente, puesto que hay documentos que no aparecen. Además esta empresa no justifica adecuadamente un pago de Caepionis a ella misma por valor de más de 136.000€.
Desde Izquierda Unida de Chipiona, consideramos que es inaplazable que los que gobernaban Chipiona y el partido que los sustentaba den cuenta de esta gestión, sin utilizar la técnica del avestruz: esconder la cabeza bajo tierra o salir corriendo.
En ese sentido, el concejal de IU, Pepe Mellado, ha asegurado:“ La auditoría ha revelado la mala gestión del gobierno anterior: la falta de transparencia en la selección de empresas da pie a especulaciones sobre “empresas amigas”, el pago antes de la ejecución de la obra explica la falta de control sobre las construcciones e instalaciones. A bote pronto, y sin entrar en cuestiones legales, esta gestión ha supuesto entre otras consecuencias es devolver más de un millón y medio de euros al Ministerio de Industria, cuando lo que realmente se ha recibido a fondo perdido es 1.9 M€.”

Pepe Mellado