El P. Popular, se congratula de que, por fin, se haya dado una explicación de las intenciones de colocar un Parque Eólico Marino, frente a las costas de Chipiona, en unas Jornadas celebradas el pasado sábado, en el Polideportivo Municipal, donde han intervenido, por parte de diversos sectores, personalidades como: el Presidente de la Red Eléctrica, el Vicerrector de la UCA, un representante de MIGRES, un representante de OCEANA y el Magistrado de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, todos en principio favorables a la instalación del parque, y en contra a esa instalación, el portavoz de la Plataforma “Por un Horizonte sin Molinos” y Presidente del CANS, D. Rafael Ruiz López.

Dada la importancia de estas jornadas, y en pro de la información, el P. Popular estuvo presente, con la totalidad de su Grupo Municipal, su Presidente y una gran cantidad de afiliados y simpatizantes, a los que se les recomendó asistir, para que se informaran de primera mano de lo que está aconteciendo, en torno a esa industria eléctrica, que nos quieren montar frente a otra industria, como es la hostelera, y que parecen ser incompatibles, porque la instalación de los molinos pueden afectar negativamente al sector turístico.

De los diferentes conferenciantes, el P. Popular saca las siguientes conclusiones:
-El representante de la Red Eléctrica y el de Migres, se limitaron a exponer que el cambio climático y el aumento de CO2, son un problema y hay que corregirlo, y una de esas correcciones, es la producción de energías limpias, cosa unánimemente aceptada por todos los conferenciantes. Más tarde, se limitaron a dar una serie de datos, tanto eléctricos y de consumo uno, y de probabilidades de colisión de las aves y su posibles efectos en las rutas migratorias otro, por lo que se recomendaba un estudio mas exhaustivo, para dar el visto bueno al proyecto.
-Por su parte, el Sr. Juez Baltasar Garzón, hizo hincapié en que, dadas las circunstancias de dos partes enfrentadas, no era bueno ese enfrentamiento, por lo que recomendó información, reuniones y consenso, advirtiendo que en caso de colisión de intereses y daños, cada uno será responsable ante la justicia, de los efectos perniciosos producidos. Dio el visto bueno a las energías limpias, pero no apoyo sin condiciones el Proyecto de Chipiona, dada la buena defensa hecha por Rafael Ruiz de lo negativo del proyecto, por lo que concluye, que esto se debe estudiar mejor y no hacer nada por la fuerza, sino de forma consensuada.

Las manifestaciones de Xavier Pastor, representante de Oceana y las del Vicerrector de la UCA, fueron totalmente favorables a proyecto, lo que resulta un tanto sospechoso, ya que el representante de Oceana es de Mallorca y allí, ha sido aprobada una ley, que impide la colocación de parques eólicos marinos, por sus efectos negativo en el turismo y por su impacto visual. El impacto sobre los fondos marinos y migración de especies, no entendió que fuese motivo para rechazar el proyecto en Chipiona. No sabemos el porqué no lucha para instalar parques en las costas de Baleares. Lo mismo ocurrió con el catedrático y Vicerrector de la UCA, que pese a todo, apuesta por la instalación y “se le vió el plumero” una vez que se salió de los números y las casuísticas, asegurando que sí se verán los molinos, conllevando a que haya contaminación visual, pero que más contaminación visual provoca una sombrilla en la playa que un molino en el mar. Semejante majadería, no se la tragaron ni “los palmeros del Alcalde”, que en buen número asistieron a la conferencia.

-El gran animador de la jornada, fue el representante de la Plataforma. Sus argumentos quedaron muy por encima de los esgrimidos por los que están a favor de las instalaciones. Rafael Ruiz, jugó con la ventaja de hablar y defender a su pueblo, al que conoce y ama, cosa que sus oponentes no entenderán nunca, pues los mueven otros intereses. Esgrimió en primer lugar, la incompatibilidad de la industria que nos quieren instalar en nuestra Costa, con el turismo de sol y playas, que no será la panacea, pero que nos ha dado resultado siempre. Tocó la sensibilidad del chipionero con sus playas, sus corrales, su marisqueo, sus juegos y sus puestas de sol,… algo que perderíamos para siempre ¿a cambio de qué? Quizás a cambio de enriquecer a unos cuantos, que se irán con sus beneficios y nos dejarán a nosotros con nuestros perjuicios, quizás para siempre.